Si nunca pasaste la época de carnavales en el norte de Argentina, hoy te cuento de esta experiencia para no perderte, que arranca en Enero.
El desentierro y entierro del carnaval es un rito milenario de los pueblos del norte argentino. Creencias, mitos y bailes forman parte de esta singular tradición popular.
Foto:google. Diablos de Carnaval
Durante los meses de enero y de febrero el carnaval es el gran protagonista tanto en ciudades como en pueblos, que se visten de fiesta y colores tan típicos de la zona
Lo primero que hay que hacer para comenzar los festejos, es desenterrar al diablo del carnaval, un pequeño muñeco que imita a un diablo y que simboliza al sol, quien para los locales es el encargado de fecundar a la tierra (Pachamama).
Todo es válido para divertirse. La fe religiosa se fusiona con las creencias populares y lleva a que en los diferentes pueblos comiencen los esperados y excéntricos festejos. Porque el carnaval es eso. Descontrol, alegría, diversión y, por supuesto, fiesta.
Foto: Google Festejos de Carnaval en la calle de los pueblos.
En toda la provincia de Jujuy, pero sobre todo en los pueblos que cercanos a la Quebrada de Humahuaca, los festejos han adquirido connotaciones bolivianas. Una de ellas es la presencia del diablo que, según creencias populares, baja de los cerros y se mimetiza de manera tan perfecta con los pobladores que es difícil saber quién es quién. Y, por sobre todo, quién se encuentra o no endiablado.
Los trajes coloridos permiten, junto a las máscaras y a sus típicos cuernos, ocultar a cada uno de los que participan en estos festejos.
Foto: Google. Diablos bajando de los cerros. Desentierro del carnaval.
En el norte argentino, el carnaval se celebra hasta los días finales de febrero. Y así, el primer domingo de marzo siguiente al miércoles de ceniza, es cuando el carnaval llega a su fin. Pero esta no es una despedida más. Por el contrario, se trata de todo un ritual en el que un pequeño muñeco que representa al diablo es, a medida que transcurre una peregrinación, venerado por todos los presentes. Hojas de coca, chicha, alcohol, cigarillos, frutas y quesos de cabra producidos especialmente para este rito son ofrecidas en reverencia al diablo.
El ritual consiste en enterrar, tras la música típica, bailes y lamentos, al carnaval hasta el año próximo. Se lo hace por la tarde-noche y ante la mirada de pocos, ya que el lugar secreto que se elige para que el diablo descanse en paz no debe ser conocido por la mayoría.
Disfrazados también de diablos e invocando a la madre tierra (Pachamama), se canta, se grita, se baila, se hace ofrendas y finalmente se llora, porque hasta el año próximo los hombres vuelven a la rutina, al aburrimiento y a las inhibiciones para seguir siendo considerados “normales”.
Foto: Google. Diablo de Carnaval.
El próximo año, llegado el mes de enero, los elegidos se encargarán de desenterrar al muñeco diabólico para que la fiesta se apodere nuevamente del norte, de sus montañas, sus calles y su gente.
Enero y Febrero suelen ser meses muy concurridos turisticamente en Salta y Jujuy, sin duda todo el ritual del carnaval tiene su encanto.
Ariana Nuñez
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Que buen post!!! #FloritosAbril