Victoria Cunto es Periodista, trabajó en comunicación institucional, marketing, diseño y PR, escribe para distintos medios, entre ellos El Cronista y hace un tiempo vive en Edimburgo. Me encanta conocer historias en primera persona de quienes, por un motivo u otro, se fueron de nuestro país a vivir una experiencia distinta, ya sea por meses o años, en el exterior. En esta entrevista nos cuenta cómo son sus días en Edimburgo.
¿Cuál fue el motivo por el que te fuiste a vivir a otro país? ¿Por qué Escocia?
Siempre tuve la inquietud de tener una experiencia internacional que me permitiera estar inmersa en otra cultura de manera integral. Me fascinaba – y lo sigue haciendo – la idea de probar mis límites, mi capacidad para adaptarme y llevar una vida distinta a la que tenía en Buenos Aires. El foco estuvo puesto en la experiencia más allá del destino pero el proyecto lo armamos en pareja y sí queríamos encontrarnos en una ciudad que fuese receptiva con los inmigrantes, donde pudiéramos enriquecernos y tener un crecimiento. Y Edimburgo cumplía con ese criterio.
¿Cuál fue el primer pensamiento o sensación que tuviste cuando llegaste?
Aterricé con una mezcla de emociones pero fundamentalmente adrenalina, después de todo había sacado sólo pasaje de ida y me estaba mudando a un país que no conocía. También sentí mucha satisfacción personal por haber apostado a esta experiencia y que no haya quedado en un listado de cosas que me hubiera gustado hacer pero nunca me animé.
¿Cómo te trataron los primeros días en Escocia?
Los primeros días en la ciudad nos dedicamos mucho a reconocerla: los barrios, el transporte público, los supermercados. Y también tuvimos que encargarnos de cuestiones burocráticas desde cambiar el número de teléfono, abrirnos una cuenta en el banco y encontrar un departamento. Fueron días intensos en ese sentido y por eso también nos propusimos generar espacios para recorrer la ciudad y disfrutarla.
¿En este tiempo hiciste amigos? ¿Conociste otros argentinos viviendo allá?
Me armé un lindo grupo con personas de distintas culturas de las que siento que constantemente estoy aprendiendo: escoceses, australianos, españoles y hasta polacos. Y por suerte también pude generar encuentros con otros argentinos, en este punto las redes sociales fueron un puente para lograrlo, y siempre es un placer poder hablar en tu propio idioma y reconectar con tu cultura.
¿Cómo te llevas con el clima? ¿Te afecta en algún sentido? Sabemos que los inviernos son largos y fríos…
El clima en las islas me resulta fascinante ya que en un mismo día puede salir el sol, llover y ¡hasta nevar! La amplitud térmica es extrema y puede saltar de 12 grados al mediodía a una noche de -5 pero el cuerpo es resiliente y se va acostumbrando. Vivir acá me enseñó a no tomar el sol por sentado, ahora cada vez que sale aprovecho para armar algún plan afuera. Y también aprendí a no encontrar en la lluvia un impedimento, como forma parte del clima cotidiano ya no es un motivo para pasar el día adentro, es cuestión de tener la ropa adecuada para poder disfrutar igual.
¿Qué es lo que más te gusta de la ciudad donde estás viviendo? Si viajáramos en breve ¿qué nos recomendarías visitar?
Disfruto mucho que Edimburgo es una ciudad con aire a pueblo, que se puede recorrer a pie y que tiene infinitos espacios verdes y actividades culturales para poder empaparte de la historia y las tradiciones escocesas. Me resulta interesante que es una ciudad a la que se suele dedicarle apenas 48 horas y se pone el foco en conocer el old town, Princes Gardens y el castillo. Y es una pena porque la ciudad tiene muchísimo más para ofrecer. Recomendaría salir del circuito tradicional: caminar por Water of Leith, visitar Dean Village y Cramond Island, una isla a la que ¡sólo se puede acceder a pie y cuando la marea está baja! Como experiencia les diría que no se pierdan de ir a bailar a un ceilidh, ver un atardecer en Salisbury Craigs y hacer hiking por las Pentland Hills donde podes ver las famosas coos (vacas) escocesas.
¿Cómo es la gastronomía? ¿Ya tenés algún plato preferido? ¿Extrañas alguna comida puntual de nuestro país?
Escocia tiene algunos platos que forman parte de su historia como lo son los haggis, tatties y el black pudding. Creo que es ideal probarlos para poder entender mejor la cultura pero gastronómicamente no los incorporé en mis comidas diarias. De argentina extraño por sobre todo los rituales alrededor de la comida, el poder para generar encuentros y compartir con familia y amigos. Sueño con las pastas de mi mamá, el asado de mi papá y lo mates con facturas de mi abuela. Y el dulce de leche, las empanadas ¡y todo! Me pasa que estoy más argentina que nunca y siempre ando nostálgica de los sabores de nuestro país.
¿Cuáles son las tres cosas que más te gustan y las tres que no?
Mi debilidad son los espacios verdes y las infinitas oportunidades que tenés dentro de la ciudad y en los alrededores para hacer hiking y despejarte. También aprecio mucho el amor que los escoceses tienen por su país y sus tradiciones, desde el uso de kilt, tocar la gaita o festejar Burns Night una noche para homenajear al poeta nacional. Las tradiciones atraviesan el país y no se ven sólo en la capital. El punto que menos disfruto es que las relaciones sociales están mediadas casi exclusivamente por el alcohol y la actividad por excelencia es ir al pub ya sea a la salida del trabajo o como plan de fin de semana.
¿Qué le dirías a alguien que tiene muchas ganas de irse, pero está con dudas?
Que las mejores aventuras de su vida están del otro lado del miedo. Creo que el foco suele estar puesto en lo que estamos dejando: trabajo, familia, amigos y la seguridad que eso nos genera pero todo se esclarece cuando logramos poner el foco en lo que se gana al animarse. Les diría que más que tenerle miedo al movimiento, le tengan miedo a quedarse quietos. Estoy convencida que no hay margen para equivocarse si nos conectamos con lo que genuinamente deseamos. Desde el punto de vista práctico les aconsejaría que lean sobre el destino y despejen dudas antes de viajar, sobre todo con los requisitos legales para residir, trabajar y estudiar en ese país.
¿En algún momento pensaste “pego la vuelta”?
Valerte sólo de vos mismo en algún momento te genera incertidumbre e inestabilidad. Creo que cuando eso pasa es esencial entender que todo lo que sentimos es parte del proceso y que es cuestión de atravesarlo. Vivo este momento como una etapa y no como algo definitivo, soy receptiva e intento medir internamente como me voy sintiendo para tomar decisiones. Hoy por hoy no me veo instalada en Buenos Aires pero como dicen “la sangre siempre tira” y la familia es muy importante para mí asi que no descarto en algún momento volver a Argentina.
Las fotos pertenecen a Victoria Cunto, Instagram @theoutlandertravels
Nat Ramil
Excelente nota,realista,sincera y descriptiva.